Un llamado a la unidad
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La unidad es la mejor arma para impedir el retorno del Socialismo del Siglo XXI.
Tras el Decreto de “Muerte Cruzada”, con el cual el presidente Lasso disolvió la Asamblea Nacional el pasado 17 de mayo, arrancó la lid electoral, que, para muchos de los ahora presidenciables, pasó de ser una probabilidad a ser algo muy esperado, puesto que ya estaban manejando una campaña anticipada.
Fernando Villavicencio, Yaku Pérez, Otto Sonnenholzner, Jan Topic, Daniel Noboa, entre otros, son los nombres de los pre candidatos de “oposición” de centro derecha, a excepción de Yaku con una tendencia de izquierda, mientras que el Correísmo con gran astucia aún no ha mostrado su figura para esta contienda, y tampoco el oficialismo (sin astucia) que considera la reelección de Guillermo Lasso.
La gran cantidad de nombres y dispersión de una supuesta oposición, nos da a notar lamentablemente que a los candidatos lo que menos les importa es el país. Sus egos, los grupos de poder económico que los manejan y la extraña ambición, están por encima del clamor ciudadano que pide unidad. Sin preocupación alguna, quien disfruta de esta pugna de vanidades, es el líder de la Revolución Ciudadana, al saber que, con su voto duro, más la división de votos de la derecha, fácilmente se posiciona en segunda vuelta, si en la primera no logra dar una sorpresa.
Conocemos claramente las consecuencias del retorno del SSXXI, la desdolarización, el hiperpresidencialismo, la criminalización de la protesta, muertes y desapariciones de líderes sociales o miembros de las FFAA como el General Gabela, racionamiento de alimentos, leyes mordazas, falta de libertades y sobre todo el pacto con narcotraficantes que serviría para aparentar una paz momentánea; en fin, el camino a otra Venezuela sumida en la miseria.
Si esto llega a suceder, sabemos los nombres de los responsables, el sinnúmero de candidatos, los malos políticos que utilizan al Ecuador como una túnica para jugar a los dados y luego repartírsela, burlándose de la ciudadanía que confía en ellos ingenuamente y que es tristemente utilizada.
Este es un llamado, tenemos la oportunidad de no regresar al pasado de corrupción, de mirar el futuro con esperanza, impidiendo el regreso del caudillo financiado por las mafias, tenemos la oportunidad de reestructurar la forma como elegimos a nuestros mandates, para terminar con esos dos enemigos que impiden el desarrollo del país: el CNE y los malos políticos.
No podemos soportar a personas que miren la política como un negocio, como una oportunidad para invertir dinero en campañas y recuperar al ganar los espacios de poder, para luego acomodarse junto a sus amigos, hermanos, cuñados, y demás familia, sin conocer en lo absoluto sobre el manejo de la función pública, repartiéndose la riqueza de nuestro pueblo e ignorando las necesidades del país.
Señores candidatos, sean honestos consigo mismos, recuerden el motivo por el cual ingresaron a la vida política, hagan un examen de conciencia y representen al Ecuador con orgullo y dignidad, no solo a su círculo. Están a tiempo de dar cada uno lo mejor de sí mismo, uniéndose en un solo grupo que defienda al país de la banda delincuencial tan peligrosa que quiere regresar por lo que les faltó.
Estamos a tiempo de la unidad.
