Escribe para buscar

Datos

La recaída del comercio mundial

Compartir

Las cifras muestran un cambio en todos los indicadores del comercio respecto al 2018. Los detalles a continuación.

La contracción del comercio. Producto de la desaceleración económica de finales de 2018, y el incremento de las tensiones comerciales globales, las exportaciones de bienes y el comercio de servicios de América Latina están contraídos. Las principales causas con: la fluctuación de precios y una ralentización de la demanda real. Algunos indicadores de las transacciones de comercio exterior y de las percepciones de los operadores, permiten dar una visión prospectiva de esta coyuntura de desaceleración. El Barómetro del Comercio de Mercancías de la OMC, que sintetiza varios índices de la tendencia y dirección de los flujos comerciales, en junio de 2019, estuvo en 95,7, por debajo del valor base de 100, mostrando la tendencia de la desaceleración. De hecho, el primer semestre de 2019, el valor del comercio mundial de bienes se contrajo 2,6% respecto al mismo periodo del año anterior. El dato indica una fuerte discontinuidad con relación a 2018, cuando los intercambios del comercio internacional se expandieron 9,6%. Esta contracción se manifestó a partir del cuarto trimestre de 2018, poniendo fin a una fase expansiva desde 2016, en un escenario en el que las importaciones de los Países en Desarrollo (PD) registraron un leve y persistente declive, y las compras de los Países En Desarrollo (PED) sostuvieron el desempeño comercial global, manteniendo cierto vigor hasta octubre de 2018.

Las guerras comerciales influyen. Este estancamiento está relacionado con la disminución de la demanda en varias economías, así como por la incertidumbre que generó la guerra comercial arancelaria entre EE.UU. y China, y la falta de claridad sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea (Brexit); causando un desvío de los flujos comerciales, efectos secundarios en las cadenas globales de valor y consecuencias sobre las decisiones de inversión. Desde la poscrisis iniciada en 2010 no se había observado un intervalo de estancamiento de los flujos reales del comercio mundial tan prolongado como el correspondiente al primer semestre de 2019. La descomposición muestra un cambio de signo de prácticamente todos los indicadores respecto al año 2018. Los precios del comercio mundial se redujeron a una tasa de 2,6%, en fuerte contraste con el crecimiento de 6,0% registrado en 2018; por otra parte, los indicadores reales muestran un deterioro que llevó al 0,0% la tasa de crecimiento estimada del volumen global. Además, las presiones a la baja sobre los precios de algunas materias primas reforzaron el deterioro de los determinantes reales del comercio internacional. En un panorama de inédita incertidumbre se retroalimentan fuerzas recesivas para el comercio y surgen riesgos para el desempeño exportador de América Latina y el Caribe.

Etiquetas:

Deja un comentario

Your email address will not be published. Required fields are marked *