E-commerce, sin barreras geográficas para vender
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Planificación, ejecución, medición y una buena estrategia de marketing son claves en el e-commerce, tomando en cuenta que el usuario cambió y su adaptación y desarrollo digital son cada vez más rápidos.

El inicio de la pandemia marcó un antes y un después en el ámbito digital, los negocios migraron -forzosamente- a una gestión digital.
Si bien, se tenía un conocimiento general de plataformas internacionales de compra y venta de productos y servicios en línea -la gran mayoría internacionales- y del uso de redes sociales para promocionar los mismos, se identifica una estrategia transversal de hacer negocios en línea que va mucho más allá de promocionarse en redes sociales y hacer comercio electrónico o E-commerce.
Cuando hablamos de E-commerce, hacemos referencia a cualquier actividad que implique realizar comercio en un ámbito digital o en línea, desde una venta que se puede generar vía Whatsapp, hasta un desarrollo de una plataforma que permita tener una vitrina virtual para los productos o servicios de los negocios con integraciones de pagos electrónicos y logística para la entrega de los bienes adquiridos por el usuario. Pero, ¿cuáles son las ventajas de tener presencia en E-commerce?
Adicional a la expresión coloquial, “mientras más te muestres, más te vendes”, que hace referencia a que mientras tengas presencia en más lugares, tienes más probabilidades de vender, encontramos una serie de ventajas al tener nuestro negocio en E-commerce, desde:
1. Ausencia de barreras geográficas: Al tener nuestro negocio en un ámbito digital, las barreras geográficas desaparecen. Antes estábamos limitados a vender nuestros productos o servicios en una zona geográfica limitada dónde teníamos nuestro punto de venta y atención. Ahora podemos ofrecer nuestros productos y servicios a nivel nacional e internacional utilizando la estrategia adecuada.
2. Confianza y Reputación: Existen riesgos inherentes a pertenecer al entorno digital con un negocio y esto aplica de igual manera para el usuario, ¿cuántas veces hemos escuchado de una estafa en una compra en línea? Sin embargo, existe posibilidad de mitigar estos riesgos al ofrecer confianza a nuestros clientes y usuarios, a través de certificados digitales, pasarelas de pago acreditadas y con certificaciones de seguridad, integración logística para un delivery exitoso; consecuentemente esto genera una buena reputación de nuestro negocio y una posible recomendación a otros usuarios.
3. Agilidad en los procesos de compra y venta: Nuestros usuarios cambiaron, así como sus necesidades y expectativas. El usuario digital busca un producto o servicio en línea, realiza una investigación del mismo, compara características, valores agregados, especificaciones técnicas y precios. Una vez que toma su decisión busca una plataforma que sea rápida, ágil y que le brinde confianza para realizar su compra; así, mientras menos pasos tenga que realizar, la compra será mucho más rápida y cómoda.
4. Incremento de clientes potenciales: Un negocio puede estar en varios lugares con sus productos, redes sociales, marketplaces, e-commerce propio, entre otras; esto hace que su visibilidad aumente y con una estrategia de comunicación adecuada -de igual manera- el número de usuarios a los que tiene alcance, por consiguiente, una mayor probabilidad de generar una venta
Sin duda el éxito de un negocio en el ámbito del comercio electrónico dependerá de la planificación, ejecución y medición de resultados, lo cual va de la mano con una adecuada estrategia de marketing digital. Este proceso no tiene que ser complejo ni costoso, siempre podemos buscar aliados estratégicos y herramientas que acompañen nuestra estrategia y objetivos.
Finalmente, debemos tener en cuenta que, el usuario cambió, ahora es un usuario digital, lo que significa que los negocios también deben cambiar para adaptarse a estas nuevas necesidades.