La adaptación a la automatización laboral es urgente
Compartir

La automatización laboral en la era digital no tiene marcha atrás. El reto consiste en aprovechar esta transformación digital para disminuir la brecha de género en el mercado laboral.

La transformación digital y laboral. Más allá del internet y el uso de dispositivos electrónicos con fines informativos, hoy en día la tecnología ha modificado actividades y procesos. La incertidumbre aumenta en la sociedad en algunos casos porque existe el riesgo de incorporar nuevas tecnologías y desplazar al ser humano de su puesto de trabajo habitual; esto implicaría mayor eficiencia para las empresas, pero menor empleo para la población. En consecuencia, los trabajos del futuro dependerán de las tareas y habilidades de cada trabajador.
La brecha de género en la era digital. Tanto hombres como mujeres podrían llegar a perder su trabajo, sin embargo, un estudio realizado por el Banco Interamericano de Desarrollo determina que las mujeres (21%) son más propensas a ser desplazadas de sus tareas dentro de su ocupación frente a los trabajadores hombres (19%) debido a una clara diferenciación en tareas y habilidades, consecuencia de una importante y larga diferenciación educativa y laboral entre ambos géneros. Disminuir o incrementar el riesgo de automatización, dependerá de cómo cada individuo emplea sus habilidades, de la forma que estime más conveniente, tomando en cuenta que ciertas habilidades son más automatizables que otras. Generalmente a los hombres se los involucra en tareas de gestión mientras que a las mujeres se las vincula con tareas rutinarias; no obstante, el ser humano de esta era tiene el reto de desarrollar habilidades digitales.
La brecha de género en el mercado laboral tradicional es evidente. En muchos países del mundo, y en la región la situación no cambia: mayor cantidad de mujeres trabajan en ocupaciones peor pagadas, dedican más tiempo a trabajos de cuidados a niños o adultos mayores que en muchos casos no son remunerados y tienen una incipiente participación en los campos de CTIM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) respecto a los hombres. La fuerza laboral del futuro requiere habilidades para desarrollar, implementar y usar tecnología, sin embargo, hay que recordar que aún existen tareas que tienen un menor riesgo de automatización debido a que demandan de habilidades con las que un robot difícilmente cuenta; pero, debido al avance acelerado de la tecnología, y aunque la economía GIG a través de sus múltiples plataformas digitales brinda empleos con flexibilidad horaria y acceso a clientes y redes internacionales, surge una pregunta: ¿cómo se puede aprovechar la transformación digital para disminuir la brecha de género en el mercado laboral?