Escribe para buscar

Debate Sub Portada

La gobernabilidad en juego en el referéndum

Compartir

El referéndum convocado por el presidente Guillermo Lasso, quien haciendo una apuesta arriesgada, espera recibir el apoyo favorable de la mayoría de la población en las ocho preguntas.

Foto: Gianna Benalcázar – CCQ

Ecuador inicia el 2023 con un inédito triple proceso electoral que se desarrollará el 5 de febrero, en el cual se elegirán 5.660 autoridades seccionales y a los siete miembros del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS). Y adicionalmente, se llevará a cabo el referéndum convocado por el presidente Guillermo Lasso, quien, haciendo una apuesta arriesgada, espera recibir el apoyo favorable de la mayoría de la población en las ocho preguntas que ha planteado para enmendar la Constitución vigente desde 2008 en asuntos relacionados a seguridad, institucionalidad y medio ambiente.

De los resultados de estos comicios dependerá, en gran medida, el grado de gobernabilidad que tendrá el gobierno para impulsar su agenda de cara a la segunda mitad de su mandato de cuatro años.

El estado de ánimo predominante con el que la ciudadanía acudirá a las urnas será de pesimismo en el porvenir, desaprobación a la gestión de las autoridades e insatisfacción con el funcionamiento de la democracia.  Una combinación que, como ya se vio en los dos violentos paros indígenas de octubre 2019 y junio 2022, resulta peligrosa, dado que la ciudadanía deja de reconocer al Estado como un actor capaz de solucionar sus problemas, por lo cual busca mecanismos por fuera de los canales e instituciones democráticas para hacer escuchar sus demandas. Por esta razón, en cada elección, la ciudadanía busca depositar su confianza en nuevos actores, que se identifican como “no políticos”, lo cual agudiza aún más la crisis de los partidos políticos.

Como muestra, un botón: el 77% de los alcaldes buscarán la reelección por una tienda política distinta a la que ganaron las elecciones seccionales de 2019. Por lo cual, el resultado más probable será nuevamente un tablero político fragmentado, que obligará a las organizaciones políticas a construir alianzas y a buscar figuras para las elecciones presidenciales de 2025.

En esta línea, a pesar de que las encuestas pronostican una victoria del Sí en la mayoría de las preguntas del Referéndum, la alta desaprobación con la que cuenta el gobierno de Guillermo Lasso, sumado a la relevación de una supuesta trata de corrupción en las empresas de los sectores estratégicos, podrían llevar a que la ciudadanía vote por el No como castigo. En caso de ganar el Si, el gobierno habrá obtenido una importante victoria que le dará oxígeno.

El medio ambiente estará presente en la consulta popular

Sin embargo, deberá administrar la expectativa de la ciudadanía de que, con las enmiendas constitucionales, podrá solucionar los problemas en seguridad, institucionalidad y medio ambiente; siendo especialmente el primero dado que más 52% considera que la inseguridad es el principal problema del país (Market, dic. 22). En caso de ganar el No, el gobierno enfrentará un panorama complicado, en el cual enfrentará a una oposición fortalecida, con mayor control sobre la Asamblea Nacional y a un movimiento indígena que ha advertido con convocar a nuestras movilizaciones, que buscarán bloquear y desestabilizar al gobierno.

Contenido sugerido

Etiquetas:

Deja un comentario

Your email address will not be published. Required fields are marked *